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VIII JORNADAS DEL GRUPO IBÉRICO DE ARACNOLOGÍA Opiliones cavernícolas de la Península Ibérica Carlos E. Prieto Departamento de Zoología y Biología Celular, Universidad del País Vasco, Apdo. 644, 48080 Bilbao, España carlos.prieto@ehu.esEl catálogo de los Opiliones ibéricos ha sufrido algunos cambios desde las 127 especies que se citaban en la última check-list (Prieto,2003): Prieto y Fernández (2007) añaden tres nuevas especies para el género Leiobunum y Prieto (en prensa) corrige los errores detectados y expurga una quincena de elementos espurios, a la vez que revalida algunos otros, quedando el nuevo censo conformado por 115 especies. Puesto que la reducción afecta sobre todo a especies foráneas erróneamente señaladas como ibéricas y que el aumento se debe a la descripción de endemismos, se incrementa la endemicidad de la fauna ibérica, y ya se encuentra por encima del 60%. Casi un tercio de los endemismos está constituido por elementos cavernícolas. Prieto (en prensa) también relaciona una docena de especies inéditas que en futuros trabajos irían siendo descritas, una de las cuáles, troglobia y anoftalma, encontrada en los Montes de Triano (Vizcaya) se ha presentado dentro de un nuevo género en el reciente XVII International Congress of Arachnology de Brasil. Esa relación incluye también otras dos formas cavernícolas, las cuáles son objeto de este trabajo. Según la clasificación de Pavan (1958), una reelaboración del sistema de Schiner-Racovitza, 1907, de trogloxenos, troglófilos y troglobios, la fauna cavernícola se clasifica, en función de su grado creciente de adaptación y restricción al medio subterráneo, en siete categorías reservándose el carácter de verdadero cavernícola a las formas troglobias. Así, las tres categorías pueden encontrarse en el género Ischyropsalis: I. helwigi lucantei es muscícola y ocasionalmente puede encontrarse en la zona de entrada; I. nodifera presenta población estrictamente hipógeas, como la del sistema de Ojo Guareña; I. magdalenae es exclusiva de las cavidades de los Montes de Triano (Prieto, 1990a, 1990b). Numerosas especies de Opiliones se han citado de cavidades subterráneas; pocas veces se indica la profundidad pero en muchos casos se trata de individuos que buscan la oscuridad y la humedad de las zonas de entrada, como ocurre con varias especies de la familia Sclerosomatidae, p. ej., Gyas titanus, Cosmobunus granarius, Leiobunum granulosum o Astrobunus grallator han sido repetidamente encontradas en los primeros metros de cuevas y túneles (Gorrotxategi & Prieto, 1990; Rambla, 1970, 1977; Prieto & Fernández, 2007).La Península Ibérica está dividida en ocho distritos biospeleológicos (Bellés, 1987). Salvo el distrito Catalán, todos parecen contener opiliones cavernícolas, incluido el Central, donde queda una especie innominada de Nemastomella (Prieto, 2004), pero los mejor representados son los distritos cántabro-pirenaicos, que albergan 17 de las 23 especies consideradas cavernícolas. La provincia de Vizcaya es la más rica en opiliones cavernícolas (Bs, Id, Im, Kn, Ns). Las nuevas especies de Opiliones cavernícolas son las siguientes: Scotolemon sendrai sp.nov. El género Scotolemon Lucas,1860 está representado en la Península Ibérica por seis especies, todas epígeas salvo S. lucasi (Simon,1872), acantonada en las cuevas norpirenaicas. Los machos de las especies conocidas son oculados, tienen un tamaño de 1.5 mm o más, un espolón en el lado ventral del trocánter IV y un pene con placa ventral ancha, a veces excavada en su zona central, mientras que la nueva especie, procedente de Cova Xurra (Gandía, Valencia) tiene únicamente 1.1 mm de longitud, un prominente oculario anoftalmo, carece de espolón en el trocánter IV y la placa ventral del pene es estrecha y apicalmente redondeada. Ischyropsalis galani sp.nov. El género Ischyropsalis está representado en la Península por cuatro especies troglobias: I. dispar e I. gigantea tienen scutum parvum, mientras que las hembras de I. magdalenae e I. navarrensis tienen scutum laminatum, diferenciándose por el grado de reducción del oculario, el tamaño de los terguitos abdominales y la forma de la protuberancia quelicérica y la bursa. El nuevo taxón procede del macizo costero de Mendaro-Izarraitz, situado a más de 30 km de los macizos más próximos poblados por otros Ischyropsalis cavernícolas. Hasta ahora se conocen únicamente dos machos. Presentan una marcada despigmentación, con oculario apenas esbozado y ojos muy reducidos ( 0.05mm), protuberancia quelicérica con forma cónica y con bursa reducida, pilosidad de patas larga y erecta. La morfología de los quelíceros y oculario sugieren una relación más estrecha con I.navarrensis, lo que se confirmará con el hallazgo de hembras si éstas presentasen un scutum laminatum. Burnia spelaea Prieto (en prensa). Conocida únicamente por un macho, procedente del Soplado de Mina La Buena (Montes de Triano). Se trata de un elemento muy aislado cuyos parientes más próximos se encontrarían en la región del Caúcaso.
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