son el de Santa Margarida, el Croscat y el
Montsacopa o también conocido como de Sant Francesc. El Croscat es
famoso porque el terreno donde se encuentra está "cortado" y se pueden
apreciar perfectamente los estratos geológicos.
También despierta un gran interés la Fageda d'en Jordà, un inmenso
bosque de hayas (Fagus sylvatica), lugar perfecto para perderse y
pasear, tanto a pie como en bicicleta, a caballo o en carro.
Otro atractivo turístico de Olot es su cocina, la llamada "cocina
volcánica". Una de las mejores y más conocidas recetas son las Patatas
de Olot.