XV JORNADAS DEL GRUPO IBÉRICO DE ARACNOLOGÍA Ciencia y gestión en espacios naturales protegidos Emilio C. Retamosa1 (1) Parque Natural Cabo de Gata-Níjar. Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio. Junta de Andalucía. Oficina Administrativa P.N. Cabo de Gata Níjar. C/Fundición s/n. 04115. Rodalquilar, Níjar, Almería. Los espacios naturales protegidos son, de acuerdo a los conceptos de su fundación, espacios de encuentro entre el desarrollo de la conservación de la naturaleza y la generación de conocimiento. Por ejemplo, en las Reservas de la Biosfera, la generación de conocimiento mediante investigación científica se considera explícitamente como uno de los pilares fundamentales para su funcionamiento. Sin embargo, la práctica diaria nos presenta aislados estos dos campos: la gestión y la investigación. Ambos campos responden a estímulos y rutinas muy diferenciadas de forma que la comunicación entre ambas se ve seriamente dificultada. Atendiendo al papel desarrollado por las administraciones competentes la gestión de un espacio protegido se encuentra vinculada, de una parte, a la aplicación de la normativa que regula las actividades en su ámbito territorial, en escrupulosa aplicación de los procedimientos administrativos que regulan la relación entre los ciudadanos y las administraciones. Por otra parte, los preceptos que sobre la conservación del patrimonio natural se establecen a niveles constitucional y estatutario, mueven las actuaciones que de motu propio realizan las administraciones para la conservación y mejora del medio natural. En otro ámbito, la generación de conocimiento, especialmente en el marco de los Organismos Públicos de Investigación, se desarrolla en base a unas reglas de búsqueda de excelencia que le impone la necesidad de garantizar la continuidad de la financiación de su actividad. Si bien, en sí mismo, esto no debería ser un impedimento la práctica real hace que se enfoquen una serie de problemas muy alejados del ámbitos de la gestión de los espacios protegidos. La situación actual muestra determinadas vías de influencia de un ámbito en el otro que a priori resultan escasamente operativas. La aproximación de la generación del conocimiento a la aplicación del mismo a la gestión (interfaz Ciencia-Gestión) requieren de unas circunstancias en las que los recursos materiales y personales permitan el adecuado flujo de información entre estos dos ámbitos. Esta aproximación, escasamente desarrollada en la práctica, requiere de esfuerzos por ambas partes relacionadas más con un cambio de paradigma que con las meras relaciones entre administraciones. |