|
LIBROS |
|
|
|
|
A Spider's World. Senses and
Behavior |
|
|
Friedrich G. Barth. 2002 |
|
|
|
Springer-Verlag, Berlín, Heidelberg, Nueva
York. XIV + 394 pp. 309 figuras. |
|
|
|
16 fotografías a color fuera del texto.
4º. Cubiertas rígidas. ISBN: 3-540- |
|
|
|
42046-0. Precio: 64,95 EUR. |
|
|
|
|
|
|
|
Los grandes mercados de abastos, aparte de la función a la que están
destinados, pueden proporcionar excelentes lecciones de zoología y de
botánica. Además, en las secciones de productos exóticos, frutas
tropicales por ejemplo, pueden hallarse sorpresas interesantes para los
especialistas en artrópodos. La fascinante historia que nos cuenta
Friedrich Barth en su libro A Spider’s World. Senses and Behavior
empieza justamente en el gran mercado de abastos de Munich, con el
hallazgo de la araña centroamericana Cupiennius salei (Keyserling,
1877) (Araneae, Ctenidae), en la década de 1960. Una araña que, en manos
de una sucesión de especialistas, se convertiría en protagonista
principal de los más sólidos estudios electrofisiológicos hoy
disponibles en el mundo de los arácnidos. |
|
|
|
|
|
|
La
estrecha relación de Barth con Cupiennius salei, comienza en
1963. Con 23 años y de vuelta a Alemania después de una estancia en la
Universidad de California en Los Ángeles, en el laboratorio de Ted
Bullock, Barth adoptó esta araña de gran porte como modelo experimental
para continuar sus investigaciones en los órganos liriformes, bajo la
dirección de Hansjochem Autrum, en la Universidad de Munich. En 1967
obtuvo su doctorado, en 1970 su habilitación en zoología y en 1974 una
cátedra en la Universidad de Frankfurt, la cual dejó en 1987 para
trasladarse a la Universidad de Viena. A lo largo de todos estos años,
Cupiennius salei ha sido su constante compañera de ruta, y tan
sólo en su grupo de trabajo ha sido el objeto de 21 tesis doctorales, 41
tesis de grado, y más de 150 artículos científicos sobre percepción
sensorial y comportamiento. Con ello, Cupiennius salei se ha
convertido en la araña mejor conocida desde este punto de vista.
El
libro A Spider’s World. Senses and Behaviour es la síntesis de
los resultados obtenidos, y se organiza en cuatro grandes apartados: A)
La biología general de Cupiennius; B) Los sistemas sensoriales;
C) El sistema nervioso central y sus nervios periféricos; D) Sentidos y
comportamiento. A la vista de los antecedentes mencionados y de los
contenidos del libro, pudiera parecer que se trata de un tema
extremadamente especializado, que no puede interesar más que al
electrofisiólogo puro y duro. La realidad es que no puede decirse que se
trate de un libro de divulgación para el gran público, puesto que es
ciertamente especializado, pero sí puede decirse que todos los temas
están tratados con gran amplitud de miras, con tendencia a la
generalización y a la búsqueda de regularidades, de manera que cualquier
aracnólogo, y cualquier artropodólogo, encontrará sus contenidos de
interés. Además, se nota que el autor, que abre y cierra el libro con
citas de Baltasar Gracián, se ha tomado un interés especial por hacer
inteligibles al máximo los conceptos y las metodologías experimentales,
tanto por el tono amable que acostumbra a emplear, como por el enorme
esfuerzo gráfico realizado. Prácticamente no se halla una sola hoja del
libro que no tenga ilustraciones (hay un total de 309 figuras en blanco
y negro y 16 fotografías a color), lo cual es de gran utilidad a la hora
de atravesar los pasajes más electrofisiológicamente áridos, que los
hay, como no podía ser de otro modo.
A
este comentarista, que estudia temas similarmente áridos pero usando
otros artrópodos como modelo, a veces le cuesta definir lo que puede
considerarse un trabajo muy bueno. Sin embargo, lo que sí reconoce
fácilmente es un trabajo sanamente envidiable, es decir, un trabajo de
otro que le habría gustado hacer a él. A Spider’s World. Senses and
Behaviour es el tipo de síntesis que me gustaría hacer, cuando
hubiera reunido los datos necesarios, como Barth después de casi 40 años
de dedicación, casi devoción, a un pequeño animal de ocho patas que una
vez se convirtió para siempre en compañero inseparable de viaje.
|
|
|
|
|
|
|
|