Gibbaranea Archer,
1951 es un género de distribución
Holártica. Este género está
representado en la Península Ibérica por las
siguientes especies:
G.
bituberculata (Walckenaer, 1802);
G. gibbosa
(Walckenaer, 1802) y
G.
ullrichi (Hahn, 1834). La presencia de esta
última especie necesita ser confirmada, ya que solamente se
conoce una antigua cita debida a Bacelar (1934) en la localidad de Mata
de Leiria (Portugal).
Aunque la identificación de las especies se basa en la
observación de la estructura de los
órganos
copuladores, los machos de
G. gibbosa
presentan una apófisis en la base de la
articulación de la uña con el tallo del
quelícero.
-
Araña orbitela jorobada, Gibbaranea bituberculata (Walckenaer, 1802), el
bulbo copulador
presenta una gran
apófisis media, transversa, muy esclerotizada, con un fuerte
espolón en el extremo inferior y, en el superior, un
lóbulo irregular. El conductor está muy
desarrollado,
esclerotizado, situado en la zona apical del bulbo, tiene forma de gran
cuenco. El
epigino,
transverso, más ancho que largo, mostrando a cada lado los
repliegues de las piezas basales del epigino que acompañando
a
un corto y ancho escapo, terminado en un grueso reborde.
-
Araña orbitela gibosa, Gibbaranea gibbosa (Walckenaer, 1802), el
bulbo copulador
muestra la apófisis media, también con un
espolón en su extremo inferior, pero el superior de forma
mazuda y romo. El
epigino
es transverso, mucho más ancho que largo, muy esclerotizado
y
mostrando a cada lado las piezas basales laterales, en forma
semicircular, convergiendo en el centro del epigino donde nace
un
pequeño y corto escapo membranoso.